Mis dos mundos, de Sergio Chejfec …porque, así como uno no elige el momento en que va a nacer, también ignora los mundos variables que va a habitar. Regreso a mi casa. Llego a mi casa con el mismo sentimiento de melancolía con el que me fui, sintiéndome aún muy pérdida. Salvo alguna escritura esporádica, este tiempo ha sido de pausa, de
Leer Más - Una nueva lectura de El otro Joyce[1], de Roberto Ferro. El escritor no desaparece, tiene su lugar, pero desde ese lugar, no podrá controlar la escena de lectura y todas las variantes de interpretación. Mi primer encuentro con Jorge Cáceres se remonta a agosto del 2012. Él ya se había instalado en la oficina de su tío en los pisosLeer Más
- Mi encuentro con “la Simona” Una crónica sobre Les mandarins (Los mandarines)[1] de Simone de Beauvoir Las lecturas, mis sucesivas y continuas lecturas, se van enhebrando en un tejido que se inicia sin diseño previo. Un trabajo de las manos, solo dispuestas a sujetar las agujas anticipando desde esa lazada inicial al goce del oficio yLeer Más
- Cariñosamente Pepe Sobre Las ratas y Sombras suele vestir, de José Bianco En el extremo de la galería me sorprendió una cascada de agua muy blanca que saltaba por los cristales abiertos y corría por el suelo. Era el batón de puntillas de mi madre. Mi mesa de trabajo se había vestido de fiesta con la llegada de LaLeer Más
- Una mano tendida sobre La asfixia de Violette Leduc ¿pero es que no hay poetas en todas partes y no es menos cierto que los tilos huelen bien por la noche? La asfixia de Violette Leduc fue publicada, en su versión original francesa “L’Asphyxie”, en 1946. Para ese entonces, la escritora francesa, nacida en Arras en 1907 tenía 39Leer Más
- “Un desierto que monologa”[1] Sobre La Bastarda, de Violette Leduc …Y creí que escribía sin lápiz ni papel porque escuchaba, porque retenía la caricia, el matiz, el romance del viento entre las hojas. Voy promediando La Bastarda –la novela que la escritora francesa Violette Leduc publica en 1964– y me detengo a mitad de caminoLeer Más
- La escritura desde el recuerdo ¿No es escribir lo que escribo una manera de dar? He leído en continuado –luego de finalizar Una mujer– tres libros de Annie Ernaux, en este orden: La mujer helada (1981); No he salido de mi noche (1997) y Memoria de una chica (2016). He contenido el impulso de escribir luego de cada lectura, quizásLeer Más
- Ya no volveré a oír su voz Sobre Una mujer, de Annie Ernaux Una mujer[1] fue publicada en 1987, primera edición en español en el 2020. Es un texto breve que Annie Ernaux escribe, como una suerte de catarsis, cuando fallece su madre, que vivía en los últimos años en una residencia para ancianos con diagnóstico de Alzheimer. La novela gira enLeer Más
- Literatura y amistad Sobre Ya te llegará. Correspondencia 1984-1997. Margo Glantz/Tamara Kamenszain. Entre la lectura entrecruzada de Annie Ernaux y Milan Kundera, se ha colado un libro pequeñito, recién publicado por Eterna Cadencia: Ya te llegará[1], que reúne la correspondencia entre Margo Glantz y Tamara Kamenszain entre 1984 yLeer Más
- La amante en la sombra Sobre Perderse[1], de Annie Ernaux … entiendo que, desde siempre, el deseo, la escritura y la muerte son para mí intercambiables. En la crónica anterior sobre Ernaux formulaba dos preguntas, que surgían luego de la lectura sobre esa vivencia íntima de los cuerpos, eje omnipresente del libro El uso de laLeer Más